Ciudad de México
Por Leonardo Resendiz
No muchos sabemos lo que puede traer consigo la pérdida de un hijo, bien se dice que ningún padre debería enterrar a su hijo, esta leyenda justamente trata de lo que provocó el dolor de perder a un ser querido. Una madre que perdió a su hija. El fallecimiento de un hijo es una de las experiencias más devastadoras y dolorosas que cualquier persona puede enfrentar. Esta pérdida deja una huella emocional profunda y duradera en los padres, que puede afectar todos los aspectos de sus vidas y en ocasiones por el dolor se pueden tomar decisiones que rozan lo macabro, como con Pascualita.
Chihuahua es un pueblo con mucha tradición en México, donde las fiestas son gigantes y las bodas lo son aún más, en este lugar es donde la leyenda toma vida. Según la leyenda, en la ciudad de Chihuahua existe una tienda de novias llamada «La Popular», en esta tienda, se exhibe un maniquí de novia conocida como «La Pascualita». La peculiaridad de esta figura es su increíble realismo y la expresión en su rostro, que parece estar viva y muchas personas señalan que esta afirmación es completamente cierta, pues la han visto moverse de noche cuando la tienda está cerrada, las luces apagadas y las calles vacías, es ahí cuando las pocas personas que rondan las calles a altas horas de la noche y pasan por “La popular” aseguran haber visto como aquel maniquí no es tal cosa, sino es algo más, algo que no pertenece a esta plano terrenal, aseguran ver como “La Pascualita” mueve sin ningún problemas sus manos y sus ojos pestañean como los de una persona normal.
Cuenta la gente que La Pascualita no es un maniquí común, sino el cadáver. Pero, ¿por qué un cadáver sería el maniquí más importante de una tienda de vestidos de boda? En caso de que sea cierto que sea un cuerpo, ¿ A quién pertenecería el cuerpo?
Pues la leyenda cuenta que el cuerpo embalsamado pertenece a la hija del dueño de la tienda, Pascuala Esparza. Según la historia, Pascuala Esparsa perdió a su hija el día de su boda debido a la mordedura de una araña viuda negra. Desconsolada por la pérdida, decidió embalsamar el cuerpo de su hija y exhibirlo en la tienda como un tributo eterno a su belleza. Desde entonces, se dice que el espíritu de la hija vaga por la tienda y que la figura de La Pascualita cobra vida por las noches.
Esta leyenda ha intrigado a muchas personas a lo largo de los años, y aunque se considera una historia urbana, ha contribuido al misterio y la fama de La Pascualita.
Esta leyenda tiene varias versiones que hablan de la muerte de la hija de Pascuala Esparsa, algunas versiones dicen que murió envenenada por una bebida que le dió un viejo amor que al enterarse de que se casaba decidió quitarle la vida a Pascualita antes de verla casada con otro hombre. Otra versión dice que la mordedura de una araña atrapada en su vestido de novia la pico y al llegar a la iglesia cayó muerta, destrozada por la pérdida de su hija Pascuala decidió conservar el cuerpo y embalsamar para capturar la belleza de sus hija en ese día.
A lo largo de los años, La Pascualita se ha convertido en una atracción turística popular en Chihuahua. Las personas frecuentemente acuden a la tienda para admirar y tomar fotografías. La figura también ha sido objeto de numerosas leyendas urbanas y ha aparecido en programas de televisión y en artículos de prensa.
Pero cuéntanos ¿crees que el maniquí de La Pascualita es realmente un maniquí o es algo más? ¿Te atreverías a pasar por la tienda a altas horas de la noche? ¿ Ya habías escuchado de esta leyenda?, esperamos que puedas dormir bien esta noche.
